Mesopotamia, palabra derivada de la unión de dos términos
griegos y que literalmente vendrían a significar “entre ríos” o “en medio de
ríos”, es la zona de Oriente Próximo
situada entre los ríos Tigris y Éufrates (de ahí el nombre) que también
comprende otras zonas fértiles próximas a esa franja de terreno.
Y precisamente esa es la palabra clave: “zonas fértiles”.
Será en Mesopotamia donde hace unos 10.000 años se produzca la llamada revolución
neolítica, con el inicio de la agricultura. El hombre dejará de ser nómada
y comenzarán los primeros asentamientos permanentes, que con el paso de los
siglos darán lugar a las primeras grandes civilizaciones, también asentadas en
esta zona del mundo.
Por si esto no fuera lo suficientemente importante como para
recordar a Mesopotamia, también hay que decir que será en esa tierra entre ríos
donde posiblemente el hombre comience a usar la escritura por primera vez,
haciendo así que la humanidad entrase en la Historia propiamente dicha.
Hoy en día la tierra de Mesopotamia se encuentra situada en
el país de Irak, una zona azotada por guerras continuas y en la que la
principal fuente de riqueza es el petróleo.